BIOLOGÍA 2
ANA PAULINA RODRIGUEZ REYES
PROFESOR LUCIO RODRIGUEZ ARIAS
TELEBACHILLERATO: HUILOAPAN DE CUAUHTEMOC VER.
CUARTO SEMESTRE
GRUPO: "B"
CLAVE: 30ETH0310Z
©
El cáncer es el nombre común que recibe un
conjunto de enfermedades relacionadas en las que se observa un proceso
descontrolado en la división de las células del
cuerpo. Puede comenzar de manera localizada y diseminarse a otros tejidos circundantes. En general
conduce a la muerte del
paciente si este no recibe tratamiento adecuado. Se conocen más de 200 tipos diferentes
de cáncer. Los más comunes son: de piel, pulmón, mama y colorrectal.
©
El cáncer se menciona en documentos históricos muy antiguos,
entre ellos papiros egipcios del año 1600 a. C. que hacen una
descripción de la enfermedad. Se cree que el médico Hipócrates fue
el primero en utilizar el término carcinos. La
utilización por Hipócrates de este término “carcinos” (relativo al cangrejo) es puesto que
relacionó el crecimiento de las células con el modo del cuerpo del cangrejo. El
término cáncer proviene de la palabra griega karkinoma equivalente al latino cáncer. El
cáncer es el resultado de dos procesos sucesivos: el aumento de la
proliferación de un grupo de células denominado tumor o neoplasia y la
capacidad invasiva que les permite colonizar y proliferar en otros tejidos u
órganos, proceso conocido como metástasis.
©
La malignidad del cáncer es variable, según la agresividad de
sus células y demás características biológicas de cada tipo tumoral. En
general, el comportamiento de las células cancerosas se caracteriza por carecer
del control reproductivo que requiere su función original, perdiendo sus
características primitivas y adquiriendo otras que no les corresponden, como la
capacidad de invadir de forma progresiva y por distintas vías órganos próximos,
o incluso diseminándose a distancia (metástasis), con crecimiento y división más
allá de los límites normales del órgano al que pertenecían primitivamente,
diseminándose por el organismo fundamentalmente a través del sistema linfático o el sistema circulatorio,
y ocasionando el crecimiento de nuevos tumores en otras partes del cuerpo alejadas de
la localización original.
©
Las diferencias entre tumores benignos y malignos consisten en
que los primeros son de crecimiento lento, no se propagan a otros tejidos y
rara vez recidivan tras
ser extirpados, mientras que los segundos son de crecimiento rápido, se propagan
a otros tejidos, recidivan con frecuencia tras ser extirpados y provocan la
muerte en un periodo variable de tiempo, si no se realiza tratamiento. Los tumores malignos tienen
repercusiones graves, puesto que estas células consumen los nutrientes que
necesitan otros órganos. Estas masas cancerosas cada vez mayores consumen
nutrientes y energía. Mientras crece un tumor, este crea vasos sanguíneos (angiogénesis) para alimentarse, ya que
requiere energía, de modo que "mata de hambre" a los órganos que lo
rodean. Los tumores benignos
pueden recurrir localmente en ciertos casos, pero no suelen dar metástasis a
distancia ni matar al portador, con algunas excepciones. Las células normales
al entrar en contacto con las células vecinas inhiben su multiplicación, pero
las células malignas no tienen este freno. La mayoría de los cánceres forman
tumores sólidos, pero algunos no, por ejemplo la leucemia.
©
El cáncer puede afectar a personas de todas las edades, incluso
a fetos, pero el riesgo de sufrir los más comunes se incrementa con la edad. El
cáncer causa cerca del 13 % de todas las muertes. De acuerdo con la Sociedad Americana Contra el Cáncer, 7,6
millones de personas murieron por esta enfermedad en el mundo durante el año 2007.
©
El proceso por el cual se produce el cáncer (carcinogénesis) es causado por anormalidades
en el material genético de
las células. Estas anormalidades pueden ser provocadas por distintos agentes carcinógenos, como la radiación ionizante, ultravioleta,
productos químicos procedentes de la industria, del humo del tabaco y
de la contaminación en general, o de agentes infecciosos como el virus del
papiloma humano o el virus de la
hepatitis B. Otras anormalidades genéticas cancerígenas son
adquiridas durante la replicación normal del ADN,
al no corregirse los errores que se producen durante dicho proceso, o bien son heredadas y, por consiguiente, se presentan en
todas las células desde el nacimiento y originan mayor probabilidad de que se
presente la enfermedad. Existen complejas interacciones entre el material
genético y los carcinógenos, un motivo por el que algunos individuos
desarrollan cáncer después de la exposición a carcinógenos y otros no. Nuevos
aspectos de la genética del
cáncer, como la metilación del
ADN y los microARNs, están siendo estudiados como
importantes factores a tener en cuenta por su implicación.
©
Las anormalidades genéticas encontradas en las células
cancerosas pueden consistir en una mutación puntual, translocación,
amplificación, deleción, y ganancia o
pérdida de un cromosoma completo.
Existen genes que son más susceptibles a sufrir mutaciones que desencadenen
cáncer. Esos genes, cuando están en su estado normal, se llaman protooncogenes, y cuando están mutados se
llaman oncogenes. Lo
que esos genes codifican suelen ser receptores de factores de crecimiento, de
manera que la mutación genética hace que los receptores producidos estén
permanentemente activados, o bien codifican los factores de crecimiento en sí,
y la mutación puede hacer que se produzcan factores de crecimiento en exceso y
sin control.
BIBLIOGRAFIA:https://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%A1ncer